En la autenticación biométrica, el reconocimiento de las venas de la palma de la mano destaca como una tecnología de vanguardia que ofrece ventajas incomparables y una amplia gama de aplicaciones. Aprovechando los patrones vasculares únicos dentro de la palma de una persona, esta tecnología ha ganado fuerza en varios sectores, desde el control de acceso hasta los sistemas de pago.